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Venus
Un Vistazo a Venus
Descubrimiento
Conocido desde la antigüedad
Nombre
Diosa romano del amor
Distancia promedio del Sol
67,237,910 millas
108,208,930 km
0.723 Unidades Astronómicas
Masa
0.815 veces la masa de la Tierra
Diámetros del ecuador
7,521 millas
12,014 km
Duración del día 
234 días terrestres (retrógrado)
Duración de un año
0.62 años terrestres
224.7 días terrestres
Gravedad de superficie
0.91 de la de la Tierra (si pesamos 100 libras, en Venus pesarķamos unas 91 libras.)
Lunas conocidas
Ninguna
Planetas cuadro comparativo
Exploración
surface of Venus from Venera lander (1975) Mas »

Venus

Cubierto de nubes, Venus es el segundo planeta desde el Sol y pasa más cerca de la Tierra que ningún otro planeta.  A pesar de ello, permaneció rodeado de misterio hasta la Era Espacial, porque las nubes impedían la vista de su superficie.  Los primeros científicos planetarios se imaginaban un exuberante mundo de océanos, lluvias constantes y abundante vida.  La realidad, sin embargo, es muy diferente: Venus es caliente, seco y absolutamente inhóspito para la vida.

One of Venus’ volcanoes, Maat Mons.

Uno de los volcanes de Venus, Maat Mons, en una vista de radar del Magallanes.  La altura de la montaña está exagerada.

Las nubes de Venus impedían a los astrónomos ver el planeta.  Sin accidentes geográficos visibles, no podían medir la velocidad de rotación de Venus sobre su eje.  Hubo que esperar al radar capaz de penetrar nubes, apuntado al planeta por primera vez a principios de la década de 1960, para descubrir que Venus rota hacia atrás, comparado con los demás planetas del sistema solar.  Ello significa que el Sol sale por el oeste y se pone en el este.  La rotación de Venus es, además, tremendamente lenta, por lo que la duración de un “día” en Venus es mayor que un año.

La rotación “retrógrada” del planeta podría ser resultado de una colisión entre Venus y un proto-planeta de gran tamaño, hace miles de millones de años, cuando se estaba formando el sistema solar.

Los primeros vehículos espaciales descubrieron que la atmósfera de Venus es espesa y tóxica.  Está compuesta principalmente de dióxido de carbono, con una presión superficial 90 veces mayor que en la Tierra -equivalente a la presión a una profundidad de más de media milla (900 metros) bajo la superficie del océano.  La atmósfera está coronada de nubes de ácido sulfúrico sobre las que soplan vientos de alta velocidad.

Esta densa atmósfera hace de Venus el planeta más caliente del sistema solar.  La atmósfera absorbe el calor del Sol pero no lo deja escapar.  Este “efecto de invernadero” ha calentado la superficie de Venus hasta unos 860 grados Fahrenheit –temperatura suficiente para fundir plomo. 

Las primeras vistas de la superficie fueron obtenidas con los vehículos soviéticos “Lander”, que sobrevivieron sólo unos segundos antes de sucumbir a la presión y el calor.  Las imágenes muestran rocas planas y angulosas en torno a los vehículos, pero poco más.

La mejor vista de Venus proviene del vehículo espacial Magallanes, que entró en órbita alrededor de Venus en 1990.  Su radar, que atraviesa nubes, cartografió el 98 por ciento de la superficie del planeta.  El Magallanes descubrió en Venus montañas más altas que cualquiera de las de la Tierra, y el valle más largo y más profundo del sistema solar.  La superficie de Venus está puntuada por miles de volcanes.  La información del Magallanes parece indicar que algunos siguen activos, pero no se detectó ninguna erupción.  Las observaciones del vehículo sugieren que toda la superficie del planeta quedó pavimentada de nuevo por erupciones volcánicas hace unos 800 millones de años.

Los únicos cráteres de impacto detectados en Venus son grandes.  En la superficie no hay cráteres pequeños porque los pequeños asteroides se consumen en la espesa atmósfera del planeta antes de alcanzar la superficie.

Aunque hoy Venus está completamente seco, en la década de 1980, un vehículo espacial halló evidencia de que en el planeta podía haber habido bastante agua en un pasado lejano.  De hecho, puede haber habido suficiente agua para cubrir todo el planeta hasta 50 pies o más de profundidad.

Los científicos creen que el interior de Venus es muy parecido al de la Tierra, con un núcleo de hiero y níquel cubierto por un manto rocoso.  Pero, a diferencia de la Tierra, Venus no tiene placas tectónicas ni campo magnético.