Tipos de galaxias
Las galaxias pueden clasificarse de varios modos. El más común es un sistema desarrollado por Edwin Hubble, basado en la forma de las galaxias.

Las galaxias más hermosas se llaman espirales. La Vía Láctea es una espiral, y la galaxia de Andrómeda (M31) también.

The most beautiful galaxies are spirals.

Las galaxias más hermosas son las espirales, como M83, con delicados brazos espirales abrazando el bulbo central de estrellas. NGC 1365 is an example of a 'barred' spiral.

NGC 1365 es un ejemplo de una espiral barrada, con una espesa barra de estrellas extendiéndose desde el núcleo.

The largest galaxies are giant ellipticals.

Las galaxias más grandes son elípticas gigantes, como NGC 1416. Espesas franjas de polvo oscuro rodean el denso núcleo de la galaxia.

NGC 1569 is a dwarf irregular galaxy.

NGC 1569 es una galaxia enana irregular en la que se formaron miles de nuevas estrellas hace unos 25 millones de años.

Las espirales tienen discos planos con centros brillantes conocidos como bulbos. Probablemente, los brazos espirales se formaron como resultado de ondas que barrieron el disco galáctico. Como las olas del océano, estas “ondas de densidad” no mueven material, sino que afectan a la materia por la que pasan, haciendo variar sus propiedades . En el caso de las galaxias, las ondas comprimen las nubes de gas intergaláctico, desencadenando la formación de nuevas estrellas. Algunas estrellas recién formadas son masivas, calientes y brillantes, por lo que hacen brillar a los brazos espirales. Estas masivas estrellas son azules o blancas, y los brazos espirales se ven también blanco-azulados. Los huecos entre los brazos contienen estrellas viejas, que no son tan brillantes.

En algunas espirales, una onda organiza las estrellas del centro en forma de barra. Los brazos de galaxias barradas salen hacia el exterior desde los extremos de la barra. La Vía Láctea pertenece a esta clase de espirales.

Un segundo tipo de galaxias son las elípticas. Al igual que las espirales, se llaman así por su forma: parecen pelotas de fútbol americano, abultadas y difusas. En lugar de esparcirse en un disco delgado, como en las espirales, en las elípticas las estrellas envuelven el corazón de la galaxia en todas las direcciones.

Las galaxias más grandes del universo son elípticas gigantes. Contienen un billón de estrellas, o más, y pueden llegar a ocupar un millón de años luz –unas 10 veces el diámetro de la Vía Láctea. Como muchas espirales grandes, la mayoría parece que contienen agujeros negros “súper masivos” en su corazón -monstruos devoradores de estrellas hasta tres mil millones de veces más masivos que el Sol.

El último tipo de galaxias agrupa formas muy variadas: cualquiera que no sea ni espiral ni elíptica. Son las irregulares, galaxias sin forma definida. Sus estrellas, gas y polvo se esparcen arbitrariamente. Son las galaxias más pequeñas y pueden tener sólo un millón de estrellas. Estas galaxias podrían ser como las “piezas” que se juntan para formar las primeras galaxias grandes. Muchas pequeñas galaxias irregulares orbitan la Vía Láctea.

Los astrónomos también clasifican las galaxias según la cantidad de energía producida en sus núcleos. Una clase es la de las galaxias “activas,” porque producen mucha más energía que las galaxias “normales.”

Las galaxias activas más potentes son los quásares. Son de los objetos más brillantes y más distantes del universo. Un quásar puede emitir más energía que una galaxia entera, desde una región del tamaño de nuestro sistema solar. Los astrónomos creen que estos objetos contienen en sus núcleos agujeros negros súper masivos, rodeados de discos de gas. Un agujero negro es un objeto tan comprimido que tiene una gravedad extremadamente fuerte. Su gravedad es tan potente que nada se escapa de ella –ni siquiera la luz. Cuando el gas se dirige en espiral hacia el agujero negro, se calienta hasta miles de millones de grados, por lo que emite enormes cantidades de energía, y el quásar resplandece brillante.